martes, 30 de marzo de 2010

Coincidencias

Sobran tan prácticos
tan de panal
estas negaciones al sol y cuanto cielo
provistos de ascensos y descensos a infartopropulsión

sobran conductores o faltan conducidos
a menos que aceptemos que
falta conducción
la otra conducción
la propia
la nuestra conducción

sobran los podios
los venerados espacios de la consagración
sobran bandas y bandos
sólo falta que algunos resuciten y exijan
su sitio en el sillón

sobran altares
alturas sobran
dios que atiende entre los oros
pobres que acumulan bastos
y resuelven en copas
enfrentar a la espada y su señor

sobran los blancos nombres del olvido
imágenes palabras en desaparición
viajes sobran aves huyendo del propio cielo
raíz al desnudo
al extranjero
esquirlas fragmentos paredón

sobran fueros
poderes sobran
atributos decretos manos de dios
el peso de las quejas ya derrumba edificios
tribunales catacumbas
sedes de pocos
para nadie

por esto es que pensamos
digo mejor coincidimos
él pensó
entre tantos muchos otros
Miguel Ángel y yo
y hacemos pública
extensiva
una gran invitación

con cinceles
martillos
con mazas vengan
vengan con óleos con pasteles
lápiz carbonilla aerosol
pincel en mano vengan
con brochas
con buriles y gubias
clavos y alambres
con formón
vengan con tornos con espátulas
con cuerdas con tambor
vengan con los vientos
con lápiz birome marcador
con ollas con las palmas
con bastón si no hay remedio
pero vengan

urge ser multitud
apuntar fino
al centro y a los centros apuntar

urge encontrar al hombre en cada hombre
urge tomar espacio
tomar aire
apuntar con cuidado y

a lo que sobra.


PABLO JAVIER RESA

4 comentarios:

Jésica Galeano Jarcousky dijo...

"urge encontrar al hombre en cada hombre" qué mejor que encontrarse a sí mismo en la poesía! Gracias por este "llamado", cuenten conmigo!

PARTIDO DE LOS POETAS dijo...

Contamos, Jésica. Bienvenida !!!

marta goddio dijo...

Ahí voy, Pablo, en Coincidencia por atender estas

"Urgencias". Ahí voy, con la tiza o la palabra nomás.

Urge atender el testimonio
de este cielo de infancias en flor
bajando en río caudaloso de miserias
inundando las calles y las plazas
socavando los murallones de esta ciudad ciega

Urge posar la mirada
en los desordenados ramilletes silvestres
creciendo guachos de abrazos
avanzando en oleajes de ojos que nos buscan
sin encontrarnos
hartos ya de promesas y de esperas

Urge ser gota de estas aguas
ser creciente en este cauce y en esta causa
de cascada blanca de risas sin dientes
de marionetas desnutridas
de infancias mutiladas.


Marta Goddio.

Pablo Javier Resa dijo...

Gracias, Marta, por sumar este poema tuyo, tan sentido: hermoso.
Sigamos cerca, también en este grupo, uno más de los que intenta reponer la vida digna.
Un abrazo grande, colega
Pablo